Entre las variedades más comunes se encuentran las lombrices grandes, las pequeñas oxiuros y las temidas Tenias o Solitarias. Estos parásitos ingresan al organismo a través de la ingestión de alimentos contaminados, dando inicio a un ciclo que puede afectar la salud general de las personas.

La proliferación de lombrices suele ocurrir en organismos debilitados por acumulaciones de sustancias extrañas. Un intestino saludable tiene la capacidad de expulsar estos parásitos antes de que se desarrollen por completo. Identificar la presencia de lombrices puede ser complicado, siendo la expulsión de los propios gusanos el único signo definitivo de la infección.

Abordar las infecciones por lombrices implica activar el trabajo del intestino mediante un régimen alimenticio específico. Se recomienda seguir una dieta basada en pan integral, sopa de trigo machacado bien cocida, verduras y frutas durante varios días. Alimentos como cebollas, ajos y zanahorias son especialmente beneficiosos para favorecer la expulsión de estos parásitos.

En el caso específico de las Tenias o Solitarias, se destaca que estas se encuentran mayormente en personas que consumen carnes. Los vegetarianos, por lo general, tienen un menor riesgo de contraer esta infección. Para expulsar las Tenias, se sugiere el consumo de alimentos como cebollas, fresas, nueces y frutas frescas crudas. Se mencionan también el arándano, el helecho macho y las pepas de calabaza como agentes que pueden favorecer la expulsión de estos parásitos.

Un ejemplo de tratamiento para expulsar las Tenias incluye dos días de consumo de zanahorias crudas, cebollas crudas y ajos, con o sin pan integral. Al finalizar estos dos días, se recomienda tomar un purgante de aceite de ricino. Posteriormente, se realiza una lavativa con agua fresca, observando cuidadosamente si se expulsa la cabeza de la Tenia, que es la parte más pequeña del parásito.

Para los parásitos intestinales que no salen con nada  basta tomar creolina en ayunas por 3 días,  3 gotas cada mañana. 

El tratamiento natural para combatir las infecciones por lombrices se centra en fortalecer el intestino y adoptar una dieta específica. La inclusión de ciertos alimentos y estrategias puede favorecer la expulsión de estos parásitos, ofreciendo alternativas a los métodos convencionales. La conciencia sobre la importancia de mantener un sistema digestivo saludable se presenta como clave en la prevención y abordaje de las infecciones por lombrices.